THE LION KING
¿Conoces esa sensación que sientes cuando ves que todo el mundo habla sobre un tema, y además todos coinciden sobre sus opiniones, y luego te encuentras tú, desamparado, que no comprendes absolutamente nada, que intentas unirte a la conversación, pero sigues sin captarlo?.
Pues así me encontraba yo, ante el fenómeno que he decidido denominar reyleonismo. Toda una sociedad fanática y emocionada ante un musical que les ha conmovido, que les ha resultado mágico, que "no tienen palabras para explicarlo". Una crítica que luce de poder presumir de una unanimidad de cinco estrellas. Ha creado un fenómeno en cadena por amor al arte, a los musicales. Es un espectáculo que lleva más de 5 años en cartelera, y que semana tras semana, goza ante unas taquillas que marcan el sold out constantemente.
Pues por fin, tras largo tiempo escuchando con envidia las magníficas críticas que recibía, he acudido este fin de semana al musical "El rey león", y puedo afirmar con toda convicción de que este espectáculo es merecido de toda gran crítica, de todos los halagos y las buenas impresiones que la gente comenta.
Es una gran obra de arte, es un conjunto de bailes, movimientos, percusión, música, sonidos, voces, cantos, coreografías, luces, decorado, y así hasta el más insignificantes de los detalles. Es un conjunto laborado, estudiado, practicado, corregido; es el esfuerzo que ha conseguido este elenco fastuoso, desde el gran director hasta el más minúsculo vendedor de entradas, plasmar en un musical de 3 horas que sabe a poco.
Esta muy logrado cada paso que realizan los actores, asemejándose con el de sus respectivos animales, haciéndote parecer que ellos no están. Tu vista se enfoca en el animal, que cobra vida de manera mágica. Los decorados son espectaculares, un muy buen trabajo en todo el atrezo, que te evoca directamente a esa África de sabana. Los músicos, y la orquesta en general también te trasportan hasta lo mas profundo de la función.
Y es que seguiría así un buen rato, pero no quiero destripar por completo todo lo que llegué a sentir, porque quiero que aquellos desafortunados que aún no han asistido a tal evento, puedan experimentarlo por su propia cuenta y ver toda la fascinación que se respira en el ambiente tan logrado que han conseguido. No tengo ninguna mala aportación que dar, a excepción del público, que naturalmente es ajeno a la obra, debido a que no mantiene el riguroso silencio, pero no impidió que disfrutara y que me llevase este precioso recuerdo.
¿Repetiría? demasiadas veces, pero por ahora prefiero ahorrar un poquito para la siguiente vez intentar conseguir asientos más cercanos al escenario.
Recomiendo esta obra a todo el mundo, seas o no seas un amante del arte, porque si no lo eres, logrará convertirte.
Saludos.
-Marcos
Pues así me encontraba yo, ante el fenómeno que he decidido denominar reyleonismo. Toda una sociedad fanática y emocionada ante un musical que les ha conmovido, que les ha resultado mágico, que "no tienen palabras para explicarlo". Una crítica que luce de poder presumir de una unanimidad de cinco estrellas. Ha creado un fenómeno en cadena por amor al arte, a los musicales. Es un espectáculo que lleva más de 5 años en cartelera, y que semana tras semana, goza ante unas taquillas que marcan el sold out constantemente.
Pues por fin, tras largo tiempo escuchando con envidia las magníficas críticas que recibía, he acudido este fin de semana al musical "El rey león", y puedo afirmar con toda convicción de que este espectáculo es merecido de toda gran crítica, de todos los halagos y las buenas impresiones que la gente comenta.
Es una gran obra de arte, es un conjunto de bailes, movimientos, percusión, música, sonidos, voces, cantos, coreografías, luces, decorado, y así hasta el más insignificantes de los detalles. Es un conjunto laborado, estudiado, practicado, corregido; es el esfuerzo que ha conseguido este elenco fastuoso, desde el gran director hasta el más minúsculo vendedor de entradas, plasmar en un musical de 3 horas que sabe a poco.
Esta muy logrado cada paso que realizan los actores, asemejándose con el de sus respectivos animales, haciéndote parecer que ellos no están. Tu vista se enfoca en el animal, que cobra vida de manera mágica. Los decorados son espectaculares, un muy buen trabajo en todo el atrezo, que te evoca directamente a esa África de sabana. Los músicos, y la orquesta en general también te trasportan hasta lo mas profundo de la función.
Y es que seguiría así un buen rato, pero no quiero destripar por completo todo lo que llegué a sentir, porque quiero que aquellos desafortunados que aún no han asistido a tal evento, puedan experimentarlo por su propia cuenta y ver toda la fascinación que se respira en el ambiente tan logrado que han conseguido. No tengo ninguna mala aportación que dar, a excepción del público, que naturalmente es ajeno a la obra, debido a que no mantiene el riguroso silencio, pero no impidió que disfrutara y que me llevase este precioso recuerdo.
¿Repetiría? demasiadas veces, pero por ahora prefiero ahorrar un poquito para la siguiente vez intentar conseguir asientos más cercanos al escenario.
Recomiendo esta obra a todo el mundo, seas o no seas un amante del arte, porque si no lo eres, logrará convertirte.
Saludos.
-Marcos
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